Este ácaro es la causa de la menor producción de miel esta campaña en la comunidad aragonesa en la que se prevé que se recojan alrededor de 100.000 kilos. Una nueva amenaza que pone en jaque al sector al dificultar la viabilidad de las explotaciones apícolas dentro de un contexto de bajos precios y la elevada importación de miel de terceros países.
Una afección que es la principal causa de que la producción de miel en la comunidad aragonesa se reduzca prácticamente en un 50%, de manera que se pasará de una media de 200.000 kilos en anteriores campañas a alrededor de 100.000 kilos de acuerdo con las primeras estimaciones, según ha explicado Pedro Manuel Loscertales, responsable del sector apícola de UAGA-COAG, a elEconomista.es
La situación dentro de Aragón no es igualitaria. En Zaragoza y Huesca la afección se calcula en una merma de producción del 50%, porcentaje que se eleva hasta el 75% en el caso de la provincia turolense.
La pérdida de producción no es el único problema al que tienen que hacer frente los apicultores. "Nos quedamos sin producción y se pierden abejas porque mueren o el ácaro las debilita y no pueden recolectar el polen y realizar sus funciones adecuadamente", ha añadido David Rocafull, también responsable del sector Apícola en UAGA-COAG, en declaraciones a elEconomista.es
El ácaro Varroa se detectó aproximadamente el año 1986, pero los tratamientos no están siendo efectivos para erradicarlo y tan solo se ha conseguido minorar su presencia en algunos casos, aunque este año "la situación es crítica", ha afirmado Pedro Manuel Loscertales.
Una opinión que también comparte David Rocafull: "este año está fuera de lo normal. Se ha descontrolado. Nos afecta bastante porque vivimos de ello". De hecho, hay explotaciones apícolas en las que no se va a recoger ni un solo kilo de miel.
Entre las principales causas de la mayor afección este año están los efectos del cambio climático, que favorecen la propagación del ácaro y que está también contribuyendo a introducir modificaciones en las floraciones y en la propia vida de las abejas, así como la falta de nuevos tratamientos y que garanticen una mayor efectividad para combatir este ácaro.
En España, en la actualidad, solo hay tres productos en el mercado, pero de tanto usarlos se quedan sin efecto y se están creando resistencias. Ante esta situación, los apicultores piden que se impulse la investigación para desarrollar nuevos tratamientos y también que se puedan autorizar otros productos que ya se están empleando en otros países europeos.
El ácaro varroa es hoy en día el principal problema que tienen los apicultores dentro de un contexto que no es favorable para la apicultura, que lleva años soportando la caída de precios y la competencia con otras mieles importadas de terceros países.
Una situación que, sumada a la baja producción, está dificultando la viabilidad de las explotaciones apícolas y que los apicultores tengan poco margen de beneficio. Por ejemplo, la producción de un kilo de miel de milflores cuesta 2,60 euros, mientras que se paga entre 3 euros o 3,50 euros el kilo.
"No hay medidas para mantener la apicultura" -afirma Pedro Manuel Loscertales-, quien añade que "las ayudas van decreciendo". De hecho, en el sector se ha producido un recorte de las ayudas agroambientales a las que los apicultores podían acogerse por polinización.
De momento, se están dando algunos pasos presentando alegaciones a los préstamos por sequía que se van a conceder para que los apicultores puedan acogerse porque "también nos afecta la sequía. La medida es buena y nos ayudaría un poco, pero lo principal es tener productos adecuados. Lo demás son parches", según David Rocafull.
By: EVA SERENO (ZARAGOZA)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias - Thank you.