18 enero 2011

NOSEMOSIS


El agente causal es un protozoario: Nosema apisZ. que afecta el aparato digestivo de las obreras, zánganos y de la reina. El esporo de N.apis es ingerido con el alimento y destruye las células epiteliales encargadas de la digestión y asimilación, de tal manera que no se aprovecha convenientemente el alimento ingerido.
Efectos nocivos sobre las abejas:
  • Altera el metabolismo: hay menor digestión de las proteínas (polen), disminuyen así las energías (sustancias de reserva) y se reduce su longevidad.
  • Se produce atrofia de las glándulas hipofaríngeas, que degeneran y atrofian prematuramente.
  • Sobre la reina: se atrofian las ovariolas hasta producir esterilidad (recambio frecuente de la reina).
  • Anemia: se manifiesta como una parálisis, al no tener fuerza para mover las alas y volar.
Efectos nocivos sobre la producción:
  • Pérdida de abejas adultas, principalmente a la salida del invierno y principios de primavera (las abejas del invierno no pudieron acopiar reservas en su cuerpo)
  • La producción de miel disminuye en un 25%
  • El consumo de miel durante la invernada es mayor (hasta un 50%)
  • La producción de jalea real es nula (no se incorporan proteínas - atrofia de las glándulas hipofaríngeas) por consiguiente no pueden producirse reinas de buena calidad ni larvas saludables. Consecuentemente se debilita la colmena, disminuye la postura y la colonia reemplaza la reina.
Síntomatología - Diagnóstico - Tratamiento Como el intestino se "lastima", cambia su apariencia. Los intestinos de las abejas enfermas se ven blanquecinos, hinchados, flácidos, deformados; mientras los intestinos de abejas sanas son de color verdoso amarillento y turgentes (podría utilizarse como diagnóstico a campo). La presencia de diarrea, no es única de esta enfermedad; por lo tanto no sirve como diagnóstico diferencial.
Estudios realizados en La Plata (Departamento de Granja-MAA-Bs.As.) muestran que existen meses en el año en que la esporulación es mayor. La curva muestra que para las condiciones climáticas de esa ciudad la mayor esporulación de N.apis se da durante los meses de Septiembre-Octubre y Noviembre. Teniendo en cuenta este comportamiento y luego de un análisis de laboratorio, se toma la decisión con respecto a la utilización de productos químicos.
En el mercado puede disponerse de fumagilina con el nombre comercial Fumagilina B y con otro principio activo el colmesan ph.
En cualquiera de los casos deben respetarse los tiempos desde la ultima aplicación hasta la cosecha para evitar problemas de contaminación de los productos de la colmena.
La fumagilina puede suministrarse en forma de jarabe o de "torta".
El jarabe debe preparase y usarse en el momento:
  • Preparar 24 litros de jarabe utilizando dos partes de miel y una parte de
  • agua (jarabe de otoño)
  • Disolver el envase de 25gr. de Fugiprin "b" en medio litro de jarabe
  • La temperatura del jarabe no debe ser superior a 30 grados.
  • Incorporar el producto disuelto al resto del jarabe
  • Se debe administrar un litro del jarabe por colmena tres veces a intervalos de 7 días
Para el tratamiento de primavera se procede de igual manera, sólo que el jarabe a utilizar deberá ser de una parte de azúcar y una de agua.
En torta candy:
  • Mezclar bien 25 gr. de Fugiprin "b" con 2400gr. De azúcar impalpable
  • Incorporar miel para unir el polvo y adquiera una consistencia semidura
  • Dividir el total de la masa en 24 partes (120gr. Cada una)
  • Colocar cada una sobre papel, introducirlo por la piquera o colocar sobre los cabezales de los marcos con cría.
Recomendaciones para prevenir nosemosis:
  • Desinfección del material usado con ácido acético glaciar 80%, utilizando 200cc por m3. Se ubican en una pieza cerrada pilas de 6 a 7 alzas, se humedecen paños con la solución de ácido acético y se esparcen en la habitación para que se evapore. Deben tomarse precauciones porque el ácido acético es cáustico y daña la piel. El periodo de desinfección dura 7 días, luego se ventila el material como mínimo durante 48 horas antes de usarse en el campo.
  • Cambiar el 33% de los cuadros de la cámara de cría por año para disminuir la contaminación interna)
  • Evitar el exceso de humedad dentro de la colmena, como así también los lugares húmedos para la instalación del colmenar
  • Invernar con buena reserva de miel y polen
  • Tener colmenas con buena población y parejas durante todo el año
  • Realizar cambio de reina cada dos años
  • Realizar por lo menos una vez al año (otoño o primavera) un muestreo de abejas del colmenar para su análisis en laboratorio.
El análisis de laboratorio consiste en realizar un macerado de intestinos de abejas y realizar el recuento de esporos en microscopio. Según ese recuento se establece el grado de infección.
CICLO DE VIDA
Como se mencionó anteriormente el principal efecto del protozoario es causado a nivel de intestino, donde el parásito provoca seria destrucción celular con la consiguiente pérdida de la capacidad de absorción y de secreción.
Al alterarse dichos procesos básicos en el metabolismo de los nutrientes, se desencadenan una serie de trastornos metabólicos los cuales derivan en los signos clínicos.




Dentro de éstos encontramos :
  • Muerte prematura de abejas, incapacidad para el vuelo, temblores de alas, movimientos espasmódicos causados por la inanición.
  • Desarrollo deficiente de glándulas
  • Aumento del consumo, con una digestión disminuida.
  • Repleción de intestino y ampolla rectal, aumento de peso, compresión de sacos aéreos
  • Defecación en un período avanzado de la enfermedad. Heces claras en bordes externos de la celdas, marrón claro y amarillo en la piquera: enfermedad avanzada.
  • No es signo patognomonico.
  • Disminución de vida media de las abejas, por disminución de reservas, carencia proteica
  • Escasa actividad de vuelo
  • Deficiente atención a la cría
  • Abejas volando aisladamente en invierno
  • Desarrollo atrasado de la colonia, principalmente en primavera.
  • Muerte de abejas adultas
  • Debilitamiento de la colmena
PUEDEN SER SIGNOS DE NOSEMOSIS Disminución en la atención a la cría y a la reina que baja su postura.
La curva de desarrollo de la colmena y del parásito tienen cursos paralelos. CURSO Y DESARROLLO DE LA ENFERMEDAD

En primavera al empezar la cría, sobreviene una multiplicación del parásito, que ante determinadas circunstancias, se produce un estado de equilibrio entre el huésped y el parásito. NOSEMOSIS LATENTE.
En verano disminuye o se diluyen los esporos infectantes, llegando a bajar la infección.
Ante determinadas condiciones de stress, manejo, clima o estado interno de la colmena, algunas colmenas aparentemente sanas en invierno, enferman en primavera, podrían existir fases del parásito en reposo invernal. Cuando el mal tiempo se prolonga al inicio de la primavera, provocando que las abejas del invierno retrasan sus labores de recolección, se provoca un cuadro agudo con debilitamiento de la colmena.
Esta enfermedad a la que se hace mención, involucra desde una disminución en la producción (en la mayoría de los casos inadvertida por el productor) hasta la aparición de signos clínicos.
Existe una relación inversa entre la abundancia de néctar y polen y la nosemosis.
Dependiente de varios factores: Humedad, corrientes de aire, reposo invernal, ausencia de reina

DIAGNÓSTICO Clínico: Intestinos de abejas afectadas: blanquecinos, hinchados, flácidos, deformadosSIGNOS CLINICOS
Laboratorio:
Macerado de intestinos de abejas, recuento de esporos en microscopio.
Determinación del grado de infección.
Estudios realizados en La Plata (Departamento de Granja-MAA-Bs.As.) muestran que existen meses en el año en que la esporulación es mayor. La curva muestra que para las condiciones climáticas de esa ciudad la mayor esporulación de N.apis se da durante los meses de Septiembre-Octubre y Noviembre. Teniendo en cuenta este comportamiento y luego de un análisis de laboratorio, se toma la decisión con respecto a la utilización de productos químicos.
Diferente pronóstico para la determinación de esporos en primavera o a fin de verano, donde las abejas ya van a entrar en reposo.

TRATAMIENTO: Principio activo: Fumagilina
Vías de administración: Jarabe: Debe preparase y usarse en el momento
  • Preparar 24 litros de jarabe utilizando dos partes de miel y una parte de agua (jarabe de otoño)
  • Disolver el envase de 25gr. de fugiprin "b" en medio litro de jarabe
  • La temperatura del jarabe no debe ser superior a 30 grados.
  • Incorporar el producto disuelto al resto del jarabe
  • Se debe administrar un litro del jarabe por colmena tres veces a intervalos de 7 días
  • Para el tratamiento de primavera se procede de igual manera, sólo que el jarabe a utilizar deberá ser de una parte de azúcar y una de agua.
Torta candy:
  • Mezclar bien 25 gr. de fugiprin "b" con 2400gr. De azúcar impalpable
  • Incorporar miel para unir el polvo y adquiera una consistencia semidura
  • Dividir el total de la masa en 24 partes (120gr. Cada una)
  • Colocar cada una sobre papel, introducirlo por la piquera o colocar sobre los cabezales de los marcos con cría.
RECOMENDACIONES PARA PREVENIR NOSEMOSIS:
  • Evitar el exceso de humedad dentro de la colmena, como así también los lugares húmedos para la instalación del colmenar
  • Invernar con buena reserva de miel y polen
  • Tener colmenas con buena población y parejas durante todo el año
  • Realizar cambio de reina cada dos años
  • Realizar por lo menos una vez al año (otoño o primavera) un muestreo de abejas del colmenar para su análisis en laboratorio.

VARROASIS


Agente causal: Varroa destructor Oud
 
.: Clasificación: Phylum Arthropoda, Subphylum Chelicerata, Clase Arachnida, Subclase Acarida, Orden Gamasida, Familia Varroidae.

La varroasis es una enfermedad causada por un ácaro parásito que afecta a las abejas en todos sus estadios de desarrollo alimentándose de su hemolinfa , actualmente representa un grave problema en la apicultura mundial, en la que provoca masivas pérdidas, ya sea por mermas en los rendimientos individuales, o por mortalidad de colmenas.
ORIGEN Y DISTRIBUCIONVarroa destructorPor el contrario, la interacción entre Varroa destructor y A.mellifera no se encuentra en equilibrio. En esta especie el ácaro tiene la capacidad de reproducirse tanto en celdas de zángano como de obreras. La reproducción es mucho mayor y por lo tanto puede llegar a causar la muerte de las colmenas.
En 1971, apicultores de Paraguay importaron abejas desde Japón, introduciendo el parásito en América del Sur. En Argentina se detectó por primera vez en 1976 en colmenas de Laguna Blanca en la provincia de Formosa, aunque se cree que el ácaro había ingresado al país unos años antes.
En la actualidad no existen zonas libres de Varroa destructor.
parasita dos especies de abejas: Apis cerana y Apis mellífera. Sobre A.cerana el ácaro no causa daños graves, fundamentalmente debido a que sólo se reproduce en celdas de cría de zángano y a un comportamiento de defensa que poseen las abejas obreras.
fue descripto por OUDEMANS (1904) a partir de ejemplares encontrados en la Isla de Java sobre A.cerana. Es un ectoparásito que se alimenta de la hemolinfa de su hospedador. La hembra se encuentra sobre abejas adultas y en desarrollo, mientras que los estaseos inmaduros se localizan sobre las pupas. El macho tiene los quelíceros adaptados para transferir el esperma por lo que no puede alimentarse y después de fecundar a las hembras muere.
CARACTERISTICAS MORFOLOGICAS DE Varroa destructor. El desarrollo ontogenético de V.destructor comprende un estaseo larval de tres pares de patas, dos estaseos ninfales de cuatro pares de patas (protoninfa y deutoninfa) y el estaseo adulto.
Macho adulto Es translúcido, piriforme con un largo aproximado entre 750 y 900 micrones y un ancho de 700-900 micrones en su parte posterior. Es muy poco esclerotizado con excepción de sus patas que resultan más oscuras. Se localiza solamente en el interior de las celdas de cría, no se alimenta y sólo vive unos pocos días. Sus quelíceros no tienen forma de cuchillo como en las hembras, sino que son en forma de tubo y están adaptados para transferir los espermatozoides dentro de las hembras.
Hembra adulta Son más grandes que los machos. La forma del cuerpo es elipsoidal y de coloración marron-rojizo. Los juveniles tienen una coloración menos acentuada. Su cuerpo es mas ancho que largo, con 1100 micrones de largo y 1600 micrones de ancho aproximadamente. La superficie dorsal está muy bien esclerotizada y densamente cubierta de pelos de longitud uniforme. Los márgenes laterales presentan pelos de mayor tamaño y en forma de espinas. Los quelíceros tienen forma de cuchillo y conforman una estructura particularmente adaptada para lacerar la cutícula de las abejas. Las patas terminan en ambulacros bien desarrollados, membranosos, con fuertes escleritos basales y sin uñas, perfectamente adaptados para adherirse a las abejas.

CICLO DE VIDA DE Varroa destructor.El ciclo de vida de V.destructor se desarrolla en el interior de la colmena de abejas. Los pasos seguidos en el mismo se detallan a continuación:
  • La hembra adulta del parásito abandona la abeja adulta e ingresa en las celdas de cría (tanto de zángano como de obrera) que se encuentran próximas a ser operculadas. Más de una hembra puede ingresar a la misma celda.
  • Esta deposita su primer huevo aproximadamente 60 horas después que la celda ha sido operculada y a partir de entonces un huevo cada 30 horas. El primer huevo depositado en la secuencia originará un macho, mientras que los subsiguientes darán origen a hembras.
  • Aparecen los distintos estaseos del ácaro: larva, protoninfa, deutoninfa y adulto. Cada sexo presenta diferentes tiempos de desarrollo. Las hembras se desarrollan más rápido, por lo que la primera hembra de la progenie, madura casi al mismo tiempo que el macho.
  • Los ácaros adultos se fecundan en la misma celda que han nacido. Si sólo ha ingresado una hembra la fecundación se produce entre hermanos, pero si ingresa más de una hembra puede existir exocría.
  • Cuando la obrera o zángano han completado su desarrollo, emergen de la celda de cría conjuntamente con las hembras de V.destructor que pueden recomenzar el ciclo.
  • Los machos y los estaseos inmaduros que no han completado su desarrollo permanecen en la celda y mueren.
La trofalaxia y el estrecho contacto entre las abejas permite a los ácaros transferirse rápidamente a nuevos hospedadores. Las hembras permanecen por un período de tiempo sobre las abejas adultas e invaden las celdas de cría para recomenzarla reproducción.
Algunas hembras se localizan en foresia sobre abejas forrajeras y se dispersan a otras colmenas.
En la regulación del ritmo de crecimiento de una población de Varroa dentro de la colmena intervienen varios factores; en primer lugar se debe destacar el tipo de celda invadida por el ácaro. A diferencia de lo observado sobre su huésped original, Apis cerana, el parásito es capaz de reproducirse tanto en celdas de zánganos como de obreras. Presentan una preferencia en promedio 5 veces mayor por las celdas de machos respondiendo estos comportamientos a determinados controles hormonales. De todas maneras, la fracción de la población del ácaro que se aporta por esta vía es siempre inferior a la que representa el aporte de las celdas de obrera, dada la escasa presencia de cría de zánganos durante gran parte del año.
El éxito reproductivo de Varroa destructor depende en gran medida de la proporción de hembras no reproductoras, el número de huevos depositados y la cantidad de esos huevos que alcanzan el estadio adulto.
FORESIA El ciclo de vida de Varroa presenta una fase forética y una fase reproductiva. La fase forética sólo es llevada a cabo por las hembras adultas, que se localizan sobre las obreras y zánganos para colonizar nuevas colmenas. Una particularidad en esta etapa es que durante su viaje forético la hembra de Varroa puede alimentarse de la hemolinfa de la abeja y vivir por varios meses. El tiempo en que el ácaro permanece en foresia sobre la abeja depende de numerosas variables, dentro de las cuales la presencia de cría y el clima presentan fundamental importancia.
La fase reproductiva puede ocurrir solamente durante el período en que existe cría de abejas en las colmenas.
La diseminación puede darse por diversos métodos, dentro de los cuales se deben mencionar:
Por medio de los zánganos que pueden acceder libremente a las distintas colmenas.
Por medio de las abejas forrajeras que se encuentran realizando sus tareas fuera de la colmena y a su regreso pueden ingresar en otras colmenas.
Cuando se produce pillaje de una colmena a otra. Las colmenas pilladas son las más débiles y por lo general las más afectadas por los parásitos. Así, las abejas que ingresan a una colmena debil a realizar pillaje pueden al salir llevar consigo parásitos a sus propias colmenas.
Por causa de enjambres silvestres que se encuentran cerca del apiario e incluso por la captura de enjambres por el propio apicultor.
Por el manejo del apicultor con el traslado de nucleos de un apiario a otro o con el intercambio de cuadros de cría entre colmenas.

CICLO DE VIDA DE Varroa destructor
La trofolaxia y el estrecho contacto entre las abejas permiten la rápida diseminación del ácaro
Sobre las abejas se pueden observar las hembras adultas y fecundadas, dispuestas a penetrar a una celda a punto de ser operculada.
En el interior de las cedas se produce la puesta de huevos, el desarrollo de los diferentes estadíos y la fecundación.
Varoas adultas sobre una pupa de obrera
Con la emergencia de la abeja los hembras de Varroa que han alcanzado su estadío adulto también emergen y se disponen a parasitar una nueva celda. Ante determinados niveles de infestación se presentan diferentes malformaciones en las abejas emergentes.

DAÑOS PRODUCIDOS SOBRE Apis mellifera
Acción directa:Cuando la prevalencia del ácaro en la colmena es alta, las abejas parasitadas al emerger de las celdas de cría presentan diversos tipos de malformaciones. Las mas comunes se presentan en las alas, patas (donde generalmente disminuyen el número de artejos) y abdomen. Otro de los efectos perjudiciales ocasionados por el parásito es una disminución en la vida media de los hospedadores.
Acción indirecta:
Las alteraciones que V.destructor puede ocasionar en forma indirecta estan ligadas fundamentalmente a la acción inoculativa de diversos tipos de microorganísmos. Se ha comprobado que el ácaro es capaz de inocular bacterias y diversos tipos de virus. Existen evidencias de que V.destructor crea dentro de una colmena las condiciones ideales para el desarrollo del hongo patógeno Ascosphaera apis. Más recientemente, se ha observado que el ácaro es capaz de transportar sobre su cutícula esporas de Paenibacillus larvae, agente causal de la loque americana.
Los signos clínicos pueden presentarse como una disminución en la producción de la colmena, muchas veces inadvertida por el productor, o bien en los casos de infecciones severas puede acarrear a la muerte de la colonia.
La parasitosis disminuye la longevidad de obreras y reinas, afectando su postura; los zánganos reducen y hasta pierden su capacidad reproductiva.
Las pupas muertas pueden alcanzar diferentes grados de putrefacción, desprendiendo un olor nauseabundo.
La presencia del parásito provoca en las abejas una actividad más intensa, ya que las mismas tratan de desprenderse de los ácaros. En invierno en caso de infecciones medias y fuertes, son incapaces de formar el bolo invernal y mueren. ocasiona sobre sus hospedadores diversos tipos de alteraciones que pueden agruparse en dos categorías: de acción directa o indirecta.

CONSECUENCIAS PRIMARIAS DE LA PARASITOSIS DIAGNOSTICO:
METODOS DE DETECCIONA simple vista, según el grado de infestación pueden observarse los ácaros sobre las abejas adultas, zánganos u obreras.
Cuando no existe ninguna referencia sobre el apiario que se quiere revisar, se debe focalizar la atención en las celdas de zángano, dado que Varroa tiene preferencia por este tipo de celdas. Se toma un objeto cortante (puede ser un bisturí, aguja, etc.) con el cual se desoperculan las celdas y se observa detenidamente. Si el ácaro está presente se ve adherido a los cuerpos de las larvas o pupas y contrasta sobre el color perla de la cría por su color marrón rojizo. También se debe examinar el interior de las celdas, ya que el ácaro podría encontrarse sobre el fondo y paredes de las mismas y no adherido a la cría. Para ello es conveniente utilizar una linterna o colocar el cuadro de cría bajo una luz fuerte.
Diagnóstico en cría:
Debido a su distribución sobre el panal de cría, a fin de obtener datos más precisos se hace necesario desopercular entre 50 y 100 celdas determinadas en forma de cruz sobre la cara del panal y se procede a la observación cuidadosa tanto de la cría como del fondo y paredes de las celdas. Los ácaros adultos (color marrón rojizo) y formas inmaduras (color blanco perlaceo) se observarán a simple vista.
Para cuantificar el porcentaje de infestación se determina:
Número de celdas examinadas (totales)
Número de celdas con ácaros (parasitadas)
Divida el número de celdas parasitadas por el número de celdas totales y multiplique por 100. Como los valores de prevalencia fluctúan considerablemente a lo largo del año, es recomendable orientarse a fin de tomar la decisión de utilizar algún tipo de control y con ayuda de extensionistas o personal especializado escoger el método y la estrategia más conveniente.
Diagnóstico en abejas adultas:
También se puede detectar la presencia de Varroa sobre las abejas adultas. Para ello se deben "cepillar" como mínimo 200 abejas (con cuidado de no incluír a la reina) dentro de un recipiente con agua y detergente y agitarlo fuertemente durante unos minutos. Posteriormente se vacía el contenido del recipiente a través de una malla que retenga las abejas y deje pasar los ácaros y se examina la muestra para cuantificar el número de parásitos.
Para cuantificar el porcentaje de infestación se determina:
Número de ácaros presentes
Número de abejas en la muestra
Divida el número de ácaros encontrados por el número de abejas adultas y multiplique por 100. Para obtener una mejor referencia sobre el grado de infestación, es conveniente realizar tanto el muestreo sobre las celdas de cría como sobre las abejas adultas para cada colmena elegida. Así, se tendrá una idea más certera sobre la proporción de parásitos presentes en el apiario.
Importancia de un diagnóstico precozComo se mencionó anteriormente, un signo de la enfermedad es la aparición en la colmena de abejas deformes con alas defectuosas, abdómenes o patas cortas. Sin embargo estos síntomas tardan en aparecer y se manifiestan ante un avance importante de la enfermedad, momento en el cual ya se han producido serias pérdidas.
Por lo tanto reviste suma importancia el diagnóstico precoz de la parasitosis, a fin de adecuar los tratamientos y el manejo al sistema de producción en si.
Notable merma en la producción individual de colmenas. Muerte de colonias. Importantes pérdidas a nivel nacional e internacional. Peligro de contaminación de miel con residuos de ante el uso indiscriminado de productos químicos. Posible aparición de resistencia al fluvalinato, ya presente en otros países como Italia. Transmisión de otros agentes patógenos en los que Varroa representa un huésped intermediario.

LOQUE AMERICANA

AGENTE CAUSALLa Loque americana (LA) es una enfermedad bacteriana producida por un bacilo denominado Paenibacillus larvae White., este microorganismo posee forma de bastón de unas 2,5 a 5 micras de largo por 0,4 - 0,8 micras, móvil con flagelos. Una característica fundamental de P. larvae es la formación de endosporas, las cuales son extremadamente resistentes al calor (30 minutos a 100 y 15' a 120), desinfectantes químicos, cloro, radiación UV (20 minutos), iodados y agua caliente con cualquier aditivo.
Las esporas de Paenibacillus larvae pueden permanecer infectivas por mas de 40 años, aunque ven disminuida su viabilidad luego de este periodo. Presentan la particularidad física fundamental de poseer movimiento browniano, por lo tanto, cuando se observan al microscopio óptico se muevan constantemente permitiendo así una mejor identificación.
SINTOMATOLOGIA Y DAÑO
 
La Loque Americana es una enfermedad de las crías que las mata después que han terminado su etapa de larva. Principalmente mueren en estado de propupa, aunque es probable que algunas lo hagan en estado de pupas. Luego de 1 mes de la muerte de la larva, es característica la formación de una escama adherida a la pared inferior de la celda pudiendo permanecer en el panal por varios años sin que las abejas la retiren.
 Cuando la enfermedad se presenta los opérculos de los panales de cría se tornan húmedos y mas oscuros, para luego hundirse. Es en ese momento que las abejas comienzan a retirar los restos larvales. Luego de muertas, las crías adquieren un color castaño y despiden un olor desagradable.
Las larvas muertas por L.A. adquieren una consistencia semifluida, que se asemeja a la goma de mascar, es por esto que cuando se introduce un palillo dentro del opérculo este arrastra un residuo castaño en forma de hebra viscosa, que se estira hasta 4 cm.
Actualmente se están presentado casos, que si bien presentan una sintomatología clínica dudosa (Loque atípica), mediante técnicas de laboratorio se confirma la presencia de Paenibacillus larvae, agente causal de Loque americana. En estos casos se presentan diferentes bacterias asociadas.

 CICLO DE VIDA
Las larvas de abejas se infectan al ingerir el alimento contaminado con esporas de LA éstos germinan irregularmente en un periodo entre 24 y 48 hs. en el intestino y dan origen a las células vegetativas (bacilo). Las bacterias no pueden atravesar la pared intestinal hasta que la larva se convierta en propupa. Cuando esto ocurre, las bacterias llegan a la hemolinfa y proliferan multiplicándose violentamente hasta matar a la cría.
Una escama posee aproximadamente 2,5 billones de esporas.
Larvas de menos de 24 horas solo necesitan 6 esporas para infectarse, mientras que una larva de 3 días necesita ingerir millones de esporas para ser infectada ; pasado este período difícilmente se infecten.
Las larvas de REINAS son más susceptibles a la enfermedad que las larvas de OBRERAS y estas que las larvas de ZANGANOS.

DIFUSION DE LOQUE AMERICANA Los principales agentes de difusión de la enfermedad son : pillaje, deriva de abejas, alimentación (miel y polen), intercambio de cría de una colmena a otra y el manejo del apicultor (palanca, guantes, panales abandonados en galpones abiertos, vehículos contaminados, etc.).
Las colonias muy afectadas de LA, ven gradualmente disminuida su población, hasta el punto que la reina con unas pocas abejas, abandonan las mismas, si bien las causas de este abandono no son aun muy conocidas, algunos autores sostienen que puede ser producido por el excesivo olor reinante en el medio-ambiente de la colmena. Este hecho deja la colmena infectada expuesta al pillaje de las otras colonias del apiario.
La Loque Americana es una enfermedad NO ESTACIONAL, que lleva invariablemente a la perdida de la colonia. Aunque puede suceder que cuando aparece un brote este luego desaparezca, es improbable que las abejas puedan retirar de esa colonia todos los esporas formados durante esa primera infección. Por consiguiente en algún momento esos esporas pueden comenzar otra vez el ciclo.
Los esporos pueden ser transmitidos a las larvas por las abejas adultas encargadas de limpiar los panales, también pueden contaminarse por esporos que persisten en el fondo de las celdas.
Las abejas adultas pueden identificar la infección muy poco después que esta se produce. Sin embargo durante la enjambrazón en el momento de elegir una nueva colmena, ellas no pueden distinguir entre panales contaminados o no, por lo cual mantener colmenas muertas y abandonadas en el campo puede ocasionar la infección de enjambres.
En la mayoría de los casos las colonias enfermas que se recuperan parecen sanar abruptamente durante la temporada de miel. Esto se debe fundamentalmente a:
  • Los esporos pueden diluirse en el néctar recién recolectado hasta tal punto que las larvas jóvenes susceptibles tienen pocas probabilidades de recibirlas con el alimento.
  • Las abejas evitan almacenar miel o polen en celdas que contengan restos larvales de larvas muertas por Loque Americana.
  • El flujo del néctar estimula el comportamiento higiénico de las nodrizas.
IMPORTANCIA DE LA MIEL COMO FUENTE DE CONTAGIO Presencia de esporos en miel:
  • 100% de las colonias infectadas
  • 26.1% de las colonias sanas ubicadas en colmenares que hayan tenido algún caso positivo.
  • 4% de las colonias sanas de apiarios que no presentan la enfermedad, pero ubicadas en zonas infectadas. (Hornitzky & Karlovskis, 1989)
Mantener bajos niveles de infección contribuye a frenar el grado de difusión de la enfermedad, ya que durante el proceso de deriva, abejas de colmenas infectadas, son capaces de transmitir la enfermedad a colmenas fuertes.
DIAGNOSTICO:Por tratarse de una enfermedad agresiva, es importante saber reconocerla y detectarla en los primeros momentos de la infección.
Se deben considerar determinadas pautas al momento de realizar la inspección :
  • Porcentaje de marcos de cría inspeccionados.
  • Localización en la cámara de cría de los marcos que se inspeccionan.
  • Frecuencia en el año/temporada con que se realizan las inspecciones.
  • Observación minuciosa de los opérculos y restos larvales.
  • Tiempo empleado en la inspección de la cámara de cría.
Durante la observación a simple vista se puede ver:
  • El panal de cría no tiene una postura pareja. Se ven celdillas vacías, sin postura, ni larvas, alternadas con celdas operculadas (cría salteada).
  • En los panales de cría suelen encontrarse opérculos hundidos, mas oscuros que lo normal, grasosos y con pequeñas perforaciones.
  • Larvas muertas de color marrón, de aspecto "gomoso", que al introducir un palillo y retirarlo se estira como "chicle".
  • Las escamas, producto de las larvas muertas, quedan adheridas longitudinalmente a la pared de las celdas. Son de color marrón muy oscuro, casi negro, muy difíciles de retirar.
  • Las larvas muertas, comienzan a descomponerse, desprendiendo un olor fuerte característico.
CONTROL Por las características propias de la enfermedad, una vez que la LA se detecta en una región muy difícilmente pueda ser erradicada por completo de dicha zona. Cualquiera de los métodos descriptos a continuación deben complementarse indefectiblemente con un programa intensivo de revisiones periódicas de los apiarios (en un intervalo de 90 días como mínimo), incluida la época invernal, ya que una sola colonia abandonada en el campo puede destruir el trabajo de varios años de control.
Resulta imprescindible adecuar las acciones tendientes a controlar la enfermedad de acuerdo a cada caso y a cada sistema en particular, debidamente asesorado por un técnico.
Destrucción por fuego de las colonias enfermas: Esta es siempre la mejor opción para erradicar la enfermedad. La destrucción implica:
  • Se debe realizar un pozo en la tierra con un diámetro de acuerdo a la cantidad de material a quemar, de aproximadamente 60-70 cm de profundidad. Sobre el hoyo se colocan 2 o 3 palos verdes o barras de metal, donde se colocará el material a ser quemado.
  • Matar las abejas mediante la utilización de un insecticida o un paño embebido en nafta (300 ml). Para este procedimiento no se debe usar humo, ya que las abejas llenan sus buches con miel contaminada aumentando el riesgo, de escape y contaminación de otras colmenas. Este procedimiento se puede realizar a cualquier hora del día debido a que las abejas que están pecoreando difícilmente presenten esporos en sus buches, ya que ellas retornan con néctar recién colectado de flores.
  • Una vez que se verifica que las abejas han muerto se procede al quemado de panales, abejas y marcos. Si el material de madera no es incinerado junto con las abejas se debe desinfectar o esterilizar perfectamente.
  • Durante el proceso de quemado se debe evitar que la miel sea derramada fuera del pozo.
  • Una vez finalizada la incineración se debe tapar el pozo, a fin de evitar el pillaje de la miel, cera y propóleos, que no se hayan terminado de quemar.
  • Este sistema es recomendable cuando la incidencia de LA en los apiarios es menor al 5% anual.
Paquetes de abejas La tecnología de paquete, es uno de los métodos mas eficaces para recuperar colonias afectadas con Paenibacillus larvae. Si bien esta tecnología no es 100% eficaz, permite disminuir la infección mejor que cualquier otra alternativa de manejo.
Los pasos a seguir son los siguientes:
  • Cortar las alas y enjaular las reinas de las colmenas afectadas.
  • Sacudir con ayuda de un embudo y un rociador de agua; las abejas dentro de un paquete, conste que las abejas deben ser rociadas previamente al sacudido. Al igual que para quemar una colonia debemos evitar el uso de humo, reemplazándolo por un buen rociador de agua con azúcar.
  • La cantidad de abejas necesarias para la confección de un paquete de recuperación de colonia, es aproximadamente 1800 gramos, que son aproximadamente 6 marcos de abejas.
  • En caso de que una colonia muy debilitada por la enfermedad no alcanzara este peso se debe completar con abejas de otra colmena.
  • Matar el excedente de abejas e incinerar los panales de cría y polen. La miel puede ser extractada si se manipula adecuadamente para evitar el pillaje. El resto del material apícola deberá ser desinfectado.
  • Colocar los paquetes con alimentador en un lugar oscuro y fresco, durante 48 o 72 horas
  • Preparar una cámara de cría, con tres marcos de cera estampada y un alimentador, nunca se deberán utilizar cuadros con cera labrada ya que las abejas tienden a colocar la miel con esporos en las celdillas.
  • Colocar el paquete dentro de la cámara, durante dicha operación se deberá sacar la reina y colocarla entre los marcos de cera estampada, retirando el tapón del candi. y mantener la cámara totalmente hermética durante 48 horas.
  • Abrir un poco la piquera y llenar nuevamente el alimentador de jarabe con antibiótico.
  • Alimentar cada 4 o 5 días, hasta que completen la cámara.
Cepillado Doble Dicho procedimiento consiste en:
  • Apartar la colmena de su lugar y colocar un nuclero vacío de cuadros.
  • Sacudir los cuadros de abejas dentro del nuclero con alimentador.
  • Los marcos de la colmena con cría deben ser INCINERADOS indefectiblemente y la cámara desinfectada. Los cuadros con cera podrán fundirse y utilizarse para estampado. La miel podrá extractarse y utilizarla solamente para consumo humano, "nunca deberá alimentar a las abejas con esa miel".
  • El núcleo, en el que se han sacudido las abejas, se dejará en el lugar hasta el anochecer para asegurarse que todas las abejas retornen del campo; en ese momento se debe cerrar con alguna tela metálica que permita la aireación y mantenerlo cerrado por 48 o 72 horas.
  • Al cabo de este tiempo el nuclero se podrá trasvasar a una cámara con cera estampada y alimentador.
  • Alimentar cada 4 o 5 días, hasta que completen la cámara.
  • En el momento que las abejas hayan labrado y contenga las primeras larvas de obreras, se debe añadir en el alimentador jarabe con antibiótico.
  • Esta técnica si bien es mas sencilla que la de paquete, ha ofrecido muchos menos resultados, tanto en recurrencia de LA, como en pérdida de colmenas durante el proceso. En la mayor parte de los casos las abejas mueren en el nuclero o abandonan la cámara.
Cepillado simple:
Quimioterapia
Oxitetraciclinas :
Sulfatiazol sódico :
Es importante recalcar que el sulfatiazol sódico permanece dentro de la colmena por varios meses en forma activa, por lo cual su uso puede contaminar seriamente la miel.
Otros antibióticos :
Tilosina :
Aceites esenciales :
Formas de Aplicación y dosis Utilización de pastas medicamentosasLas pastas medicamentosas o Tortas son formadas esencialmente por Aceite vegetal, azúcar y la droga a utilizar. La relación de cada componente es la siguiente:

  • 300 gr. de azúcar
  • 150 gr. de aceite vegetal hidrogenado
  • 1,25 gr. de clorhidrato de oxitetraciclina
A estas pastas se les puede adicionar gelatinas saborizadas de diferentes gustos, a fin de mejorar la aceptación, de las mismas.
Uno de los inconvenientes del uso de pastas medicamentosas, es la dificultad que tienen las abejas para su consumo, es común encontrar que colonias vigorosas presentan una buena utilización y las colonias pobres en población (generalmente aquellas que presentan problemas sanitarios) no lo consumen o lo consumen muy parcialmente.
EspolvoreoSe aplican por espolvoreo mezcladas con azúcar impalpable o azúcar molida, en una proporción de:

  • 43,7 gramos de azúcar.
  • 1,3 gramos de clorhidrato de oxitetraciclina.
  • distribuidos en tres aplicaciones de 15 gramos cada una.
Las oxitetraciclinas tienen el inconveniente de reaccionar negativamente con las féculas, por eso no es conveniente administrarla con azúcar impalpable (ya que muchas de estas azúcares presentan grandes cantidades de fécula), lo conveniente es moler azúcar común o administrarlo con jarabe.
Se aconseja no espolvorear los medicamentos directamente sobre los panales de cría sino alrededor de estos, ya que cuando el apicultor aplica directamente sobre la cría, los medicamentos suelen mezclarse con el alimento que las obreras dan para las larvas. La alimentación directa de la mayoría de los medicamentos lleva a la muerte de la larva.
CONSIDERACIONES FINALES ACERCA DEL USO DE ANTIBIOTICOS La eficacia del tratamiento con fármacos es muy variable, los resultados dependen del grado de contaminación del equipo, de la habilidad del apicultor y de la variabilidad de muchos factores naturales que influyen en el curso de la enfermedad.
Los tratamientos incompletos traen aparejado la aparición de resistencia por parte de las bacterias.
Por otra parte una sobredosificación representa un peligro ya que el exceso de antibiótico puede pasar a la miel; los tratamientos se deben suspender indefectiblemente 2 meses antes de la mielada para evitar la presencia de dichos residuos.
El resultado inmediato del tratamiento con antibióticos es una disminución rápida de los síntomas. Sin embargo se debe considerar que estos fármacos actúan solamente sobre la fase vegetativa de la bacteria sin tener ninguna acción sobre las esporas, con lo cual la colonia continua con la enfermedad sin presentar signos clínicos.
También debemos saber que una vez que se ha comenzado un programa de prevención y control con antibióticos, es muy difícil suspender, el uso de los mismos. Existe la posibilidad que luego de varios años de tratamientos preventivos, se desencadenen infecciones masivas de las colmenas con marcados signos clínicos, como consecuencia de ciertos problemas con los antibióticos como: resistencia por parte de las bacterias, errores de manejo, etc. (ver gráfico siguiente).
La actividad de los antibióticos disminuye rápidamente en los jarabes medicamentosos por lo que es preciso preparar solo lo que será utilizado ese día.

DESINFECCION DE MATERIALES APICOLAS Esterilización por fuego: En caso de no quemar las cámaras de cría, pisos y techos se deberá proceder a una exhaustiva desinfección que puede consistir en:
Quemado en forma de pira o chimenea:

  • Se colocan 6 o 7 alzas invertidas en forma de chimenea.
  • Se las rocía con querosén, debajo se coloca un techo o piso con un poco de querosén.
  • Una vez que todo esta listo se prende fuego, con los cuidados necesarios de estar trabajando con material inflamable y se deja arder hasta que el apicultor observe que comienza a salir humo de color negro, típico de la combustión de la madera.
  • En ese momento se coloca un techo encima de la pila de alzas con el objetivo de ahogar el fuego.
  • En caso de no apagarse lo mas aconsejable es derrumbar la pila y apagar con arena o agua.
  • Los pisos y techos se pueden quemar con querosén individualmente de uno en uno.
  • Luego de que el productor realice este procedimiento varias veces logrará hacerlo tan eficientemente que podrá desinfectar gran cantidad de material en poco tiempo.
Parafina caliente: Este sistema consiste en sumergir el material apícola en parafina a 150 grados, para dicho proceso se deben construir algunos aparatos, que permitan la realización del trabajo en forma segura. Algunos diseños como el DHT permiten una desinfección adecuada con un gran margen de seguridad. Dicho diseño permite colocar el material en parafina caliente y dejarlo por un lapso de 5 minutos sumergido, esto basta para realizar una buena desinfección. Por medio de este sistema no solo se logra un buen resultado en términos sanitarios sino que permite una mayor vida útil del material apícola.
Lavado con soda cáustica: Sumergir el material en soda cáustica al 15% con agua hirviendo, esto se debe realizar con mucho cuidado ya que el producto es altamente corrosivo y puede dañar al apicultor.
Antes de tratar los materiales, deben ser raspados para no malgastar la solución disolviendo grandes piezas de cera y propóleo y así facilitar la penetración en los huecos del material.
El material debe permanecer sumergido desde 5 a 20 minutos, como máximo ya que la solución destruye las fibras de la madera. Una vez retirado se deberá colocar en agua limpia. Se debe tener presente que el hidróxido de sodio es sumamente tóxico.
ESTERILIZACION DE MATERIALES APICOLAS RadiaciónUna de las alternativas es la irradiación con cobalto-60.
Actualmente en la Argentina se puede esterilizar todo el material de colmenas por medio de radiación Gamma proveniente de Cobalto-60. Para tal proceso comunicarse con el centro Atómico de Ezeiza.
Consideraciones finales acerca de la esterilización de panales
Indudablemente el mejor proceso de esterilización es quemar los panales que contengan restos larvales con Loque Americana; y fundir todos aquellos que no contengan cría, para su posterior estampado, ya que en este proceso gran cantidad de esporos se destruyen o son eliminados.
Muchos de los productos aquí mencionados son sumamente peligrosos para la salud y el medio ambiente, por lo que se recomienda:

  • Adquirir productos de reconocida calidad.
  • Leer bien y detalladamente las instrucciones de uso.
  • Extremar las medidas de precaución ya que muchos de ellos son sumamente cáusticos.
  • Ante la menor duda consulte a un profesional o un centro especializado.
probados in vitro, permiten vislumbrar buenos resultados en el control de la enfermedad. un antibiótico de uso común en avicultura, probado con excelentes resultados a campo en dosis de 1,5 gr. de principio activo por colmena, suministrado en un paquete medicamentoso constituido por 50 gr. de azúcar, 20 a 30 gr. de gelatina de cereza y la droga.Ultimamente fue presentado en la Univ. de La Plata, dos nuevas alternativas para el control químico de la Loque Americana:No se recomienda su uso en Argentina. Se han encontrado un gran número de cepas bacterianas de Paenibacillus larvae resistentes al sulfatiazol.Las oxitetraciclinas resultan eficaces cuando una colonia recibe entre 1,20 y 1,25 gramos en 5 litros de jarabe, concentraciones mayores son tóxicas para las abejas.

  • Colocar inmediatamente al lado de la colmena enferma una cámara desinfectada.

  • Colocar 3 cuadros de cera estampada, un alimentador y la reina.

  •  Es importante saber que mediante esta metodología solo se baja el nivel de infección de las colmenas, no se elimina la enfermedad por completo, por lo tanto es altamente probable que esta vuelva a aparecer en los próximos meses. Por lo que utilizar este método es aconsejable solo cuando el número de colmenas afectadas es muy grande y el nivel de infección de cada colmena es bajo.

17 enero 2011

POLILLA DE LA CERA

GENERALIDADES
Se trata del peor enemigo de las colmenas. Hay dos clases de polillas, con tamaño y costumbres distintas. Se trata de:
• La polilla mayor de la cera o falsa tiña (Galleria mellonella).
• La polilla menor de la cera o tiña de la cera (Achroia grisella).
Las colonias débiles pueden ser devastadas por la polilla y en algunos casos las abejas abandonan la
colmena por el olor que emana de las polillas.
Tal como sus nombres lo indican, hay una apresiable diferencia de tamaño entre uno y otro tipo de polilla (18 y 25 mm). Además, la menor, presenta un color plateado marrón uniforme en ambos pares de alas y la cabeza de color amarillo, mientras que la polilla mayor es de color marrón, gris o púrpura y su cabeza es gris o marrón claro.
CICLO DE VIDA
El ciclo biológico de la polilla es de aproximadamente 50 a 60 días, siendo la temperatura óptima para el desarrollo larval entre 30° y 35°C; la actividad larval disminuye entre los 4° y 7°C. Desde el mes de noviembre, las hembras desovan entre 400 y 1800 huevos, en un periodo de hasta 15 días; la polilla mayor los deposita en grupos pequeños (5 a 30), mientras que la menor los agrupa en gran cantidad (250 a 460).
Las polillas atacan los cuadros de cera donde los encuentren, ya sea en la colmena - tanto en la cámara de cría como la melaria- o en el galpón, manifestando una considerable preferencia por los panales oscuros
Del huevo colocado en cualquier hendija o grieta, surge una larva que fácilmente escapa de las abejas y se introduce en celdas vacías, comenzando la construcción de galerías de forma tubular que revisten de cera y excrementos. A medida que van creciendo de tamaño, alargan y ensanchan los túneles en distintas direcciones, alimentándose de cera. Al llegar a su máximo desarrollo, abandonan la cera y se dirigen hacia los laterales y cabezales del panal o hacia la entretapa, donde construyen su capullo para transformarse en pupas.
CONTROL
Un método natural para combatir la polilla es la construcción del polillero. Consiste en dejar las alzas con sus panales sin miel a la intemperie, cubiertos con un plástico o debajo de un tinglado, dispuestas de manera tal que conformen un túnel para que el viento circule por los cuerpos (cada hilera puede estar formada por diez alzas, por ejemplo), colocando en los extremos rejillas excluidoras para evitar la entrada de pájaros o ratones.
Como desinfectantes suelen utilizarse diversos productos químicos:
• Sulfuro de Carbono: Es un líquido que gasifica a temperatura ambiente. Mata la polilla, pero no destruye los huevos. Además, sus vapores son inflamables, de modo que no hay que prender fuego en sus inmediaciones. Se construye una pila de 8 a 10 alzas sobre piso firme y en el alza superior se dispone un recipiente de vidrio o loza conteniendo una cucharada sopera de Sulfuro de Carbono por cada alza colocada, cubriendo la pila con una entretapa o techo. Un día es suficiente para matar las polillas, correspondiendo una aplicación más para acabar con los huevos (o varias si se trata de un invierno benigno).
• Bromuro de Metilo: Si bien destruye todos los estadios de la polilla, su complejidad sólo lo vuelve recomendable en grandes apiarios.
• Azufre: Sobre un brasero bien encendido, se colocan 10 a 15 g de azufre por alza o 65 a 130 g por metro cúbico de ambiente. El anhidro sulfuroso que se forma es inocuo para el hombre, pero corroe los metales. Constituye un tratamiento económico que mata las larvas y los adultos de la polilla.
• Tetracloruro de Carbono: Tiene las características del anterior, pero su costo es elevado.
• Acido acético glacial: Acaba con la polilla en todos sus estadios. Sus gases son nocivos para el hombre. Se utilizan 150 cc para 3 a 4 alzas. Se aconseja reunir todo el material en una habitación herméticamente cerrada y dejar actuar el producto por 48 horas, procediendo posteriormente a su ventilación. Se recomienda repetir el procedimiento.
Enemigos de las abejas - la polilla de cera por *José Antonio Pérez
Es sabido que de los enemigos que tienen las abejas, uno de los más importantes, es la polilla de la cera. El apicultor, teniendo presente los estragos que provoca dicho enemigo, toma los recaudos necesarios para combatirlo, tanto en las colmenas pobladas, como cuando almacena alzas con cuadros con cera estampada y obrada.
En el primero de los casos, colmenas pobladas, el apicultor sabe que constituyen un medio propicio para su propagación, los panales de colmenas huérfanas o debilitadas por alguna enfermedad; esto es, en su gran mayoría, panales vacíos, o sea que no están ocupados por las abejas, en sus distintas etapas de crianza. Una vez más, queda evidenciado lo inconveniente y negativo que resulta tener y mantener colmenas débiles; por el contrario, cuando las colmenas son vigorosas, pueden llegar a ser objeto, ocasionalmente, de invasiones leves y rara vez tendrán las polillas oportunidad de prosperar a un grado que no pueda ser repelido por las abejas, pues las mismas actúan como agentes protectores sobre los panales que se encuentran dentro de las colmenas.
Distinto es el caso, cuando se tienen que almacenar alzas con cuadros; tarea que se realiza habitualmente en la época de otoño a invierno. Para evitar el ataque de la polilla de la cera, el apicultor, apenas almacenados los cuadros, procede a fumigarlos convenientemente, y de acuerdo al producto utilizado, repite el tratamiento periódicamente. Si el producto utilizado elimina las larvas, pero no los huevos de las polillas, habrá que hacer una nueva aplicación a los 10 a 15 días siguientes, para destruir las larvas que hayan nacido en ese lapso. Al respecto, debe recordarse que el desarrollo de las larvas así como también el periodo de incubación de los huevos, depende mucho de la temperatura circundante.
Por tal motivo, después de tratados, los panales deben protegerse de cualquier infectación ulterior, por lo cual se recomienda revisar periódicamente los mismos, por si requieren un tratamiento más intensivo.
Es conveniente tener presente que, cualquiera sea el producto que se utilice para fumigar los panales, los mismos, como medida precautoria, deben ser ventilados convenientemente, días antes de su incorporación a las colmenas, con el fin de eliminar posibles residuos del producto aplicado.
Amigo apicultor: es importante tener presente estas precauciones, pues es una manera de proteger su inversión y sin mayores gastos de mantenimiento.
Amigo apicultor: es importante tener presente estas precauciones, pues es una manera de proteger su inversión y sin mayores gastos de mantenimiento.
Conservación de panales por *José Antonio Pérez
Dentro de las tareas que realiza el apicultor en la preparación de las colmenas para la invernada, es la reducción de la altura de las mismas y, por tal motivo, quedan alzas con cuadros fuera de las colmenas, que son, en su gran mayoría, aquellas con panales obrados vacíos, que fueron utilizados oportunamente en la cosecha de miel.
Sobre la conservación de estos panales durante el invierno existen distintos criterios, ya que hay apicultores que prefieren dejar las alzas con los cuadros vacíos sobre las colmenas pobladas, mientras que otros apicultores optan por consevar los panales en depósito o a la intemperie, bajo galerías, aleros o bien cubriéndolos con chapas, tomando los recaudos necesarios para evitar el ataque de roedores, pájaros y polillas de la cera y la acción de la lluvia y el sol.
En el caso de dejar las alzas sobre las colmenas pobladas, el apicultor tiene la precaución de darle a estos cajones la debida ventilación, pues de no ser así, se corre el riesgo que los panales contraigan moho y hongos, debido a la condensación de agua que producen las abejas cuando consumen la miel que tienen de reserva para el invierno.
Para la conservación de panales en depósito, el apicultor coloca como base un piso de colmena, sobre este coloca un alza vacía que cumple la función de cámara de aire, y sobre esta apila de 6 a 7 alzas con cuadros con cera obrada unicamente, ya que si emplea el sistema de quemar azufre dentro de esa estiba, y por descuido hay cuadros con cera estampada, la acción del azufre oxida el alambre y cuando se necesiten esos cuadros, el alambre se cortará al menor manipuleo. Una vez hecha la estiba, se coloca sobre la misma una entretapa ciega a modo de techo, observando que no haya ninguna abertura por donde pueda salir el gas del azufre. Este tipo de tratamiento se realiza en 2 a 3 veces durante el invierno, teniendo la precaución de ventilar a la intemperie estos cajones cuando esté próximo el momento de incorporarlos a las colmenas, con el fin de eliminar posibles residuos del azufre.
Cabe destacar que también se emplean otros productos químicos para tal fin, comoser: Sulfuro de Carbono, Paradiclorobenzol, Bromuro de Metilo. Es conveniente tener muy en cuenta la correcta aplicación de estos productos, asesorándose debidamente, ya queen algunos casos son tóxicos para las personas. Lo ideal es que, apenas realizada la aplicación de producto, hay que retirarse inmediatamente del depósito para no inhalar los gases.
En caso de colocar las alzas con los cuadros a la intemperie, el apicultor procede de la siguiente manera: dispone de varios caballetes para colmenas o bases con similares características, y sobre estas coloca las alzas con cuadros, “paradas”, una junto a la otra, formando una especie de túnel, y en cada extremo coloca una rejilla excluidora clavada en el alza. De esta manera, permitirá una corriente de aire permanente a través de los cuadros y la función de las rejillas excluidoras impedirán la entrada de pájaros y roedores evitando que aniden y que rompan la cera obrada. Desde ya que es conveniente emplear este sistema colocando los cajones bajo techo.
Amigo apicultor: es importante tener presente estas precauciones, pues es una manera de proteger su inversión y sin mayores gastos de mantenimiento.
Invernada: Materiales a desinfectar  por *José Antonio Pérez
Una vez terminado el acondicionamiento de las colmenas para la invernada, el apicultor realiza la tarea específica de adecuar el material que ha quedado fuera de las colmenas, ya sean alzas con cuadros con cera obrada que han sido utilizados en la cosecha, como también todo aquel material que se ha ido retirando del colmenar durante la temporada, por distintos casos.
En esta oportunidad me referiré a éste ultimo punto, ya que el mismo es de tanta importancia como el primero. El apicultor cuando comienza a seleccionar estoas materiales, agruparáa elementos a reacondicionar para poder ser utilizados en la próxima temporada –alzas, cuadros, entretapas, rejillas excluidoras, techos y pisos-, como también descartará todo aquel material que ya ha cumplido su ciclo y sólo resta rescatar algunas partes del mismo para volver a utilizarlos; el resto se destruye.
Pero en esta tarea hay un punto que es muy importante tener en cuenta: de todo el material que se trajo del colmenar para su conservación y reacondicionamiento, casi siempre existe material que oportunamente estuvo ocupado por las abejas y por enfermedades o causas no resueltas o no comprendidas en su momento por el apicultor, estas colmenas han quedado vacías. Y este es el tema más importante a considerar: la sanidad en el material traído a depósito en estas condiciones.
Es coveniente que el apicultor separe este material del resto, y proceda a un examen exhaustivo del mismo; y una vez realizado, desinfectar el mismo, tanto sean pisos, alzas, cuadros y entretapas, a fin de eliminar posibles vestigios de bacterias y esporos infecciosos que aun se encuentren en dicho material.
A modo de referencia, hay un producto que actua muy bien como agente desinfectante para todo el material de colmenas, es el yodo, tanto por su eficacia como por su baja toxicidad., siendo, aparte, un elemento que no ataca el metal, por lo cual también sirve para desinfectar la palanca o herramienta universal cuando se utilizan en colmenas enfermas.
Desde ya, que aquel material que el apicultor al revisarlo, considera que puede estar muy contaminado, directamente lo destruye, a fin de no correr riesgos innecesarios. Cabe destacar que en el caso del material que haya que hacerle este tipo de tratamiento desinfectante, es conveniente hacerle una marca bien visible tanto a las alzas como a los cuadros, para evitar utilizarlos, por precaución, como componentes de cámaras de cría y usarlos unicamente como melarios para acopio de miel en la temporada.
Al margen de este tema tan específico, es importante no descuidar la alimentación y la sanidad en las colmenas preparadas para la invernada, ya que el desequilibrio climático que hay actualmente está perjudicando notoriamente a las colmenas, pues hay consumo prematuro de reservas y pillaje.
Amigo apicultor: no descuide sus colmenas en el invierno; esté atento a cualquier contingencia climática, pues puede provocar desequilibrios dentro de las colmenas. Sea precavido.

Alivian artritis y migraña con piquetes de abeja

Las abejas por lo general generan temor entre quien las encuentra en altas concentraciones y aún en lo individual temen los efectos del piquete que es conocido por ser doloroso, sin embargo apicultores chihuahuenses utilizan la ponzoña de este insecto como analgésico, desinflamatorio y estimulante del sistema inmunológico a fin de tratar enfermedades como una manera novedosa, sencilla y económica de aliviar males.
Explicó Martín Balcorta, pionero en esta clase de tratamiento que por medio del piquete de la abeja se pueden tratar distintas enfermedades. Primero se realiza una prueba de reacción para verificar que la persona no sea alérgica a este veneno, ya que se estima que cerca del 5% de la población lo es y en este caso no puede recibir el tratamiento.
Se detecta el padecimiento y en base a esto se localizan los piquetes, aunque lo más común son reumas, artritis, problemas de articulaciones, dolores musculares y migrañas. Lo que hace el veneno de la abeja es que desinflama y activa el sistema inmunológico, tal como en el caso de la artritis no reconoce las articulaciones y las ataca.
La sesión tiene un costo de 100 pesos y dependiendo del padecimiento es el numero de piquetes que recibirá el paciente, en la primera sesión se aplican máximo 3 piquetes, en la segunda puede ser 4 o 5 hasta en el caso de padecimientos muy graves hasta 25 piquetes.
Los efectos del piquete tales como inflamación, comezón y calentamiento, se vuelven casi imperceptibles cerca de la sexta sesión y a partir de entonces el organismo genera resistencia a la toxina, por lo que sólo se adquieren las funciones medicinales de la misma.
En el caso de padecimientos sencillos la cura puede darse en unas semanas, sin embargo en el caso de afecciones severas puede requerir de hasta seis meses y a partir de entonces pueden pasar años sin que vuelva, según aseguró el especialista.
Refiere que esta técnica la aprendió en su experiencia como apicultor ya que en cada congreso de apicultura se da un espacio para apiterapia, aunque está muy poco difundido en Chihuahua y actualmente buscar dar a conocer este tratamiento natural, ecológico, barato, sencillo y a decir de , sin ningún efecto secundario.

LA POLINIZACIÓN EN INVERNADEROS

La utilización de las abejas para polinizar cultivos en invernadero proporciona una serie de ventajas: evita malformaciones por mala polinización (fresón...), mejora la productividad (calabacín), garantiza la producción de semillas. Pero también plantea una serie de problemas que deben tenerse en cuenta:
Temperatura: por encima de 40 º C la abeja no tiene actividad; temperaturas bajas o cambios bruscos también dificultan la polinización, incluso provocando el aborto de las primeras flores.
Humedad: el mantenimiento de humedades superiores al 80 % largo períodos ocasiona problemas sanitarios a la colonia de abejas.
Iluminación: las abejas viejas, las que pecorean, son atraídas por la luz, por lo que pueden darse concentraciones de estas en determinados puntos de la cubierta.
Dieta: la dieta de las abejas en un invernadero suele ser escasa y monótona, por lo que a veces se hace necesario complementarla.
Orientación: las abejas tienden a desorientarse en los vuelos a ras de tierra, por lo que la colmena debe colocarse en alto en los invernaderos, para que sea visible desde todo el invernadero.
Plaguicidas: es absolutamente necesario que durante el tiempo que las abejas permanezcan en el invernadero se extremen las precauciones en el uso de plaguicidas, leyendo cuidadosamente las indicaciones de la etiqueta y huyendo de cualquier situación que pueda significar riesgos.
Como norma general es recomendable prever la utilización de las colmenas no más de 15 días seguidos, sustituyéndolas por otras si se considera necesario un tiempo de permanencia más largo.

FABRICACIÓN DE HIDROMIEL

ARGENTINA- FABRICACIÓN DE HIDROMIEL

Artículo publicado en la Gaceta del Colmenar de la Sociedad Argentina de Apicultores, número 263 de julio de 1963. Escrito por Juan Courtade. Las inscripciones realizadas en el artículo original, fueron realizadas por su autor.
 HIDROMIEL - para Gaceta del Colmenar por Juan Courtade
 Creo, que la mejor definición y el mejor elogio que pudiéramos hacer del hidromiel seria el afirmar que es por excelencia la bebida universal, muy ante­rior al vino de uva, ha sido conocido y usado por los hombres desde la más remota antigüedad y por todos los pueblos de la tierra. Quizás no sea aven­turado pensar, que el hombre primitivo de la leja­na edad de piedra;' familiarizado con las abejas y gran  consumidor de miel, encontrara el agua mez­clada  con aquella, mas agradable y reconfortante que sola. Este pudo haber sido el origen del hidro­miel.
En Europa, los griegos, romanos, celtas, galos, sajones y bárbaros del norte fueron grandes consu­midores de bebidas alcohólicas preparadas a base de miel y agua, conocidas con diversos nombres: Acqua mulsa, melikatron, chauchen, etcétera. Igual­mente puede decirse de los salvajes de África. Asia ~. Oceanía y de casi todos los pueblos indígenas de America, siendo todo esto testimoniado por muy numerosos escritos antiguos y modernos.
El hidromiel es pues una bebida alcohólica y agradable, refrescante, higiénica y sana como pocas, obtenida por la fermentaci6n de una solución de miel yagua. Hasta casi a fines del siglo pasado, se elabora­ba como todos los vinos mediante practicas empíricas. Casi primitivas, lo que daba Jugar a muy di­versas calidades de hidromieles generalmente malos
Hoy, la enología moderna y científica incorpo­rada a la elaboraci6n del hidromiel ha aportado nue­vas técnicas y elementos que permiten la obtención de la más variada gama, estables y muy finos. livia­nos y licorosos, de mesa y postres, secos, dulces  y charnpagnizados.
En los países de zonas templadas. donde se adaptó y prospero la viña, los vinos de uva fueron desalojando a los hidromieles, general mente de elaboración empírica y con frecuencia de inferior calidad hasta el punto de que en naciones como Fran­cia, Italia y España, donde antes fueron tan apre­ciados, en la actualidad son casi desconocidos por la industria, y elaborados solo por algunos apiculto­res para su uso particular.
Algo parecido ocurrió en Alemania, Bélgica, In­glaterra, Holanda y otros, donde se impuso la cer­veza o los vinos de manzana u otras frutas. Por el contrario, en los países fríos del norte :Polonia, Ru­sia, Escandinavia y algunos de Europa central, los hidromieles gozan hoy de gran prestigio y se los elabora de alta jerarquía.
Entre nosotros, como en algunos países de Europa ya citados. Es poco menos que desconocida. No 0 señalaremos las causas, en gran parte injustificadas, por no ser del caso. Este trabajo, escrito especial­mente para "Gaceta del Colmenar" y como modesto homenaje a S.A.D.A. en sus bodas de plata, esta des­tinado a los lectores de la revista, para quienes de­searía fuera de utilidad
El hidromiel, por el hecho de ser una bebida alcohólica. lograda mediante un proceso de ferrnen­taei6n, semejante a la del vino, es real y técnicamente tal. aun cuando no lo sea legalmente y debe ser tratada en igualdad de cuidados.
El jugo de la uva esta considerado el mosto ideal para la elaboraci6n de un vino bien equilibrado y arm6nico, debido al conjunto de los elementos que 10 componen. La miel, por su parte, tiene ele­mentos comunes con la uva (agua y glucosa, aun­que en muy distintas proporciones), otros pareci­dos que pueden ser sustitutivos y carente de otros. Los primeros deben ser equilibrados, los últimos añadidos, en las proporciones que indicaremos en su debido lugar, pues constituyen el alimento de las levaduras.
Fermentaei6n viene de la palabra latina "firve­re", que quiere decir hervir. por un fenómeno e se­mejanza visibles al de un liquido en ebullición, Au­mento de temperatura y volumen; rotación de la masa y desprendimiento de burbujas de elementos gaseosos.
La fermentación es debida, a la acción. que so­bre los azucares ejercen elementos vivos llamados fermentos 0 levaduras. que transforman especial­mente la glucosa. levulosa y dextrosa, en alcohol y anhídrido carb6nico. Los fermentos constituyen nu­merosas familias y grupos. siendo los que especial­mente nos interesan, los sacaromyces que pululan en Ja piel de los frutos. particularmente la uva, en la época de su maduración.
Puntos de capital importancia en toda fermentación vinica son:
1) la limpieza y desinfección de los enseres empleados. así como ambientes;
2) la ventilación y mantenimiento de una temperatura 10 mas estable posible que oscile entre los 18'? y
3) Una bordelesa de 1 8O a 220 litros. es la vasija mas aconsejable en la pequeña industria casera por ser la mas fácil de conseguir : es manuable, fácil de limpiar. no es demasiado grande v sí lo suficiente para mantener una relativa estabilidad de tempera­tura. cosa muy importante como va lo hemos dicho. Las bordelesas deben estar limpias, el estado per­fecto. libres de olores v gustos extraños. que de te­nerlos, serán trasmitidos al hidromiel. La desinfec­ci6n se hará  quemando una mecha de azufre cui­dando que este no gotee en el interior. porque de suceder. transmitiría mal gusto al producto también puede hacerse con una solución de 20 gramos  de metabisulfito de. potasio diluido en 300 gramos  de azua, tratando de mojar bien todo el interior. En ambos casos. dejar la bordalesa tapada durante va­rias hora, para que accione el gas sulfuroso sobre mohos y microorganismos .
La miel a emplear debe ser de primera calidad, no puede hacerse un producto  un producto fino con elemento ordinarios.
El, agua mielada, proveniente del  lavado de opérculos, tanques y enseres puede ser utilizada en la elaboración de hidromieles ordinarios, destina­dos a la preparación de vinagre, siempre menos de­licado. El agua ha de ser potable, limpia pura y ca­rente de elementos extraños: cloruros, sodio, calcio, minerales , etcétera que, combinados con los elementos del mos to alterarían el sabor y el perfume del vino.
Una solución de miel y agua, entraría espontáneamente en fermentación. pero lenta y dificultosamente. porque podríamos considerarla un verda­dero campo de batalla. donde se encontrarían una gran cantidad de levaduras diversas desasociadas, que se desarrollarían y lucharían encarnizadamente por la supervivencia .Y el dominio del medio dando por resultado muy probable, un hidromiel pésimo.
Hay que comenzar pues por esterilizar la solu­ción a la que llamaremos mosto, como al jugo de la uva y luego sembrar en el una levadura selecta y activa, que lo arrastre en la fermentación y trans­mita sus cualidades de bouquet, sabor. etcétera. Es­to se llama "pie de cuba ". El pie de cuba ideal sería el preparado con levaduras aisladas y selecciona­das, hoy difíciles de conseguir en el país, por cuya razón señalaremos un procedimiento más simple y al alcance de todos, cuál es el empleo directo de la uva, que también ha dado al que esto escribe, ex­celentes resultado.
ELABORACION
Siguiendo un orden cronológico, comenzaremos naturalmente por le pie de cuba y, desde luego, sa­biendo de antemano qué tipo de hidromiel es el que queremos preparar. Suponiendo uno de mesa, seco, rosado, de 12 grados de alcohol,. contemos con una bordelesa de 180 litros.
Conseguir 18 kilos de uva negra, la francesa, la criolla, cereza o algunas de las americanas, Goma la chinche. tan conocida entre nosotros, bien madura, sin lavarse, se quita la raspa y muelen bien los granos, depositándolos en un recipiente de vidrio, barrilito de madera u olla enlozada (evitar el con­tacto de los mostos y vinos, con metales particular­mente ferrosos en todos los manipuleos, sobre todo si ha de ser por tiempo prolongado), se le añaden 200 gramos de ácido tartárico disuelto en una ta­za de agua caliente y 50 gramos de fosfato de amo­nio disuelto en igual forma.
Cubrir el recipiente con un lienzo limpio y co­locarlo en lugar templado, siendo conveniente remo­ver de vez en cuando el contenido, enérgicamente, con una espátula de madera, a fin de airear y acti­var las levaduras, muy ávidas de oxígeno. Si la tem­peratura ambiente ha sido la correcta, 25 a 35 grados, a los tres o cuatro días estarán en plena actividad las levaduras y el pie de cuba listo para su empleo, previo escurrido en un lienzo o bolsa bien limpia a fin de despojarlo de orujos y semillas. La bordalesa limpia y desinfectada, de acuerdo a las recomenda­ciones señaladas, se colocará acostada con la boca para arriba, en el lugar previsto, que reúna las con­diciones de higiene, temperatura y ventilación indi­cadas y sobre un caballete de unos 45 cms. de altu­ra. que facilite los trabajos de trasiegos.
Según una escala debida a Pasteur, el genio creador de la microbiología y a quien debemos las bases de la enología científica, se necesitan entre 2,300 a 2,500 kg. de miel para producir un grado de alcohol por hectolitro. Esto ha de tenerse especial­mente presente, en toda elaboración de hidromiel, para calcular la cantidad de miel necesaria. Si en nuestro caso contamos con una bordelesa de 180 li­tros de capacidad, reducidos por la uva a 160 apro­ximadamente' necesita unos 2,500 kgs. de miel pa­ra obtener un grado de alcohol por hectolitro, para 12~. 2,500 x ] 2~ o sea 30 kilos y para 160 litros, 30 x 1,6~ o sea 48 kgs., y así sucesivamente; 2,500 kgs. de miel por cada grado que queramos aumentar por hectolitro.
Antes de proseguir y aprovechando la oportuni­dad, me permitiré dar otro ejemplo. Supongamos que el hidromiel que querramos hacer, es uno gene­roso de postre, dulce, blanco, de 16º y que la borda­lesa de que disponemos es de 220 litros. Para el pie de cuba buscaremos 22 kgs. de uva blanca, del gru­po moscateles por ejemplo. Se procederá en idéntica forma a la indicada.
Para calcular la miel necesaria se hará el mis­mo planteo, pero teniendo en cuenta que el vino es dulce, aumentaremos en 1 grado la graduación alco­hólica deseada, lo que nos dará: 2,500 x 17~ o sea: 42.500 y para 200 litros (20 litros aproximadamente ocuparán el pie de cuba) serán 42,500 x 2,00 o sea 85 kilos de miel.
Veamos ahora la preparación del mosto. Se mezcla la miel con una cantidad aproximadamente igual al agua, haciéndola hervir. Por falta de un ta­cho adecuado o convenientemente grande. puede re­alizarse esta operación en dos o más veces, también ha de tenerse en cuenta, de que el tacho a emplearse tenga suficiente margen, porque la solución mielada, en ebullición. se levanta como la leche. El fuego pue­de ser vivo al comienzo y moderado al final.
Las partículas de cera y otras impurezas de la miel, afloran con el hervor, en forma de espuma abundante y compacta, la que se irá retirando, a me­dida y en tanto que se produzca (tres cuartos a una hora de hervor firme) colocándola en un fuentón. Al día siguiente, ya fría se habrá separado netamen­te la espuma de una cantidad de solución mielada que se habrá precipitado y será fácil recuperarla. El mosto así preparado se vierte en la bordelesa y, una vez entibiado a una temperatura que no pase de los 36º. se le une al pie de cuba que debe encontrarse a "punto". Se añaden 100 gramos de fosfato de amonio y 200 de ácido tartárico, rellenando lue­go la bordalesa con agua, hasta dejar libre un es­pacio de 8 a 10 cms., que hará falta debido al au­mento de volumen, que provocará la fermentación. A continuación se agita fuertemente con una varilla de madera, que puede ser un mango de escoba, lim­pio y desinfectado con una solución de metabisulfito de potasio. Esta operación se repetirá todos los días, tres o cuatro veces. Se termina tapando la boca con un paño mojado, que impida la entrada de insectos y materias extrañas y permita el escape del gas.
A los dos o tres días estará el mosto en plena fermentación  tumultuosa, la que irá calmándose paulatinamente hacia los 15 ó 20 días, momento en que será conveniente reemplazar el paño de la boca por un tapón hidráulico, fácil de conseguir en la casas de química o que puede improvisarse con un tubito de goma o plástico cuyo extremo bordee dentro de un vaso de agua
El batido puede reducirse a una vez cada dos o tres días durante un mes mas.
CRIANZA
Al finalizar el período anterior, la fermentación tumultuosa habrá sido reemplazada por la lenta. Se añadirán entonces 50 gramos de fosfato de amonio, 100 gramos de ácido tartárico y 30 gramos de meta­bisulfito de potasio, siempre, se entiende, disueltos en una pequeña cantidad de agua tibia, y por se­parado, se rellenará con agua la bordalesa casi por completo, se agitará por última vez, para que se mez­cle bien todo y se tapará con un tapón hidráulico. El aire será en adelante el enemigo más peligroso del mosto y del vino.
Cinco o seis meses más tarde habrá terminado la fermentación lenta, las heces se habrán precipitado y el mosto clarificado bastante. Será el momento del trasiego a otra bordalesa, que ya debe tenerse preparada para el efecto; la operación se hará sir­viéndose de un sifón, levantado a unos 10 a 12 cms. del fondo para evitar que remueva y arrastre las he­ces. Con la operación se habrán perdido 10 a 12 li­tros que habrán de ser reemplazados hasta llenar la nueva vasija con otro hidromiel o, por falta de éste. con vino tinto o blanco si se trata de un hidromiel blanco, o también con agua y un litro de alcohol pu­ro o dos litros de buena grapa.
Se agita para que se mezcle bien y vuelve a taparse.
Un par de meses más tarde. habrá concluido toda fermentación y será el momento del encolado para obtener una clarificación perfecta y estable. La industria emplea varios productos y elementos que pasaremos por alto y nos atendremos al más sim­ple y al alcance de todos.
Separar cuidadosamente las claras de tres hue­vos muy frescos, batidos con dos litros de mosto hasta homogenizar bien v volcar en la bordalesa. Añadir una solución de 30 gramos de tanino enoló­gico, medio vaso de alcohol puro; luego pueden ponerse 40 ó 50 gramos de cloruro de sodio (Sal de cocina) disuelto en un poquito del mismo mosto. Se agita la masa y cierra la vasija como de costumbre. La albúmina de las claras, coagularán las materias en suspensión, el tanino las precipita y el cloruro da brillo.
Unos 20 días más tarde nuestro mosto al que ya podremos llamar hidromiel, perfectamente lim­pio de color vivo y brillante, estará listo para hacer el segundo trasiego en forma idéntica al primero, pero bajando el sifón hasta unos cinco centímetros 'del fondo. pues las heces apenas serán ahora de tres o cuatro litros. No olvidar el relleno del nuevo enva­se. que se hará en forma idéntica a la anterior y cierre correspondiente.
AÑEJAMIENTO La segunda etapa en la vida de un vino. ha ter­minado v comienza la tercera. la maduración. En ella tiene lugar la formación de los éteres y acoholes les superiores. que son los que constituyen el bou­quet v el aroma propio de su tino.
A los dos o tres meses del segundo trasiego (año aproximadamente de su elaboración ). va estará lis­to el  hidromiel para su embotellado, lo que se hará en botellas limpias, sanas de gustos y olores, tapán­dose con corchos de la mejor calidad
Si se desea formar una "reserva" será conve­niente lacrar los picos. acostar las botellas para evi­tar el  resecado de los corchos. guardándolas en lu­gar fresco y  oscuro.
El tiempo y los  años. harán su obra.Termino diciendo que el hidromiel no es igual ;:l ningún otro vino. porque no es ninguna imitación. Tiene su características propias y particulares, su jerarquía, es Hidromiel.
Trasponiendo los límites de la medida prudente, los hidromieles, especialmente los dulces , muy suaves. De apariencia  mansitos pueden jugar malas par­tidas. deslizándose hacia donde no deben ...
No obstante. la embriaguez originada por el hidromiel, tiene la peculiaridad singular, de producir alegría. Es al final un sembrador de buen humor.